Por Melissa Donovan
¿Son “verdes”? La mayor parte de las normas requieren que un sustrato esté “libre de” sustancias químicas o elementos específicos. Muchos productos se denominan libres de PVC, aceite, petróleo, halógenos, ftalatos y compuestos orgánicos volátiles (VOC, por sus siglas en inglés). Cuando un sustrato no contiene estos componentes podría ser menos dañino para el medioambiente o favorecer el reciclaje.
Ciertos componentes se sustituyen por elementos ecorresponsables. Estos no solo deben favorecer una composición de un producto más sustentable, sino también deben ofrecer un nivel de calidad de impresión, compatibilidad de tinta y fiabilidad requeridos tanto por el proveedor de servicios de impresión, como por el consumidor final.
Elementos y sustancias químicas comunes
Ciertos elementos o sustancias químicas son típicamente eliminados. Los PVC con cloro y otros aditivos contaminantes; halógenos; ftalatos; aceite; VOC; metales pesados (plomo, bario, cadmio); APE; formaldehído; plastificantes; BPA; lejía; compuestos; aditivos de cromo (estabilizantes y pigmentos); asbesto; organoestaño; clorofluorocarbonos; carcinógenos; fosfato; y éteres de glicol son solo algunos de ellos.
“Entre las peticiones más comunes se trata de ciertos ftalatos plastificantes que se encuentran típicamente en los PVC. Luego hay estabilizadores a base de cadmio, los cuales se usaban antiguamente en muchos de los PVC. En cuanto al polipropileno, a menudo se habla del butilbencilftalato”, comparte Dennis Brunnett, gerente de producto de publicidad para FLEXcon.
Aunque se conoce comúnmente que algunos elementos y químicos son dañinos para el medioambiente, otros han sido clasificados como perjudiciales por parte de organizaciones como Substances of Very High Concern (sustancias de mucho cuidado, o SVHC, por sus siglas en inglés) de REACH (ftalatos, colorantes azoicos, DMF, PAH, PFO, PFC y plomo).
“Según la regulación de REACH, una sustancia puede proponerse como SVHC si cumple con una o más de las siguientes condiciones: carcinogénica; mutagénica; tóxica para la reproducción; persistente; bioacumulativa y tóxica, según las normas establecidas por la regulación REACH; o en casos individuales si existe “evidencia científica de probables efectos secundarios serios para la salud humana o el medioambiente, que dan razón para un nivel equivalente de alarma”, explica Karen Stuerenberg, directora de marketing de Top Value Fabrics.
¿Cuál es el daño?
Cuando un sustrato no incluye uno de los elementos o sustancias químicas anteriormente mencionadas, su ausencia puede clasificar el medio como más inocuo. Por otro lado, si se encuentran en los medios, pueden ser dañinos para el medioambiente y las personas, o prevenir la capacidad de reciclaje.
El PVC se considera dañino e impide el reciclaje. Por ejemplo, las aplicaciones para interiores se favorecen de un sustrato libre de PVC. “Algunos PVC y formaldehídos tienen el potencial de ocasionar daños cuando alcanzan ciertos niveles en áreas bien definidas, especialmente en aplicaciones para interiores donde no existe un alto nivel de intercambio de aire”, explica Jim Tufts, gerente de unidad de Perception Wide Format Media.
“Los carcinógenos, cuando se fabrican o incineran, despiden dioxinas dañinas en el ambiente. Investigaciones han demostrado que PVC emite continuamente carcinógenos que se han vinculado al cáncer y otras enfermedades, incluso ha llevado a la retirada progresiva del producto en grandes marcas de consumidores”, concuerda Joe Deetz, Director Ejecutivo de Visual Magnetics LP.
El PVC no es reciclable y no se descompone en los vertederos, afirma John Coyne, gerente de venta de Lintec of America, Inc.
Christian Nole, coordinador de Katz Americas, explica por qué. “Si un sustrato incluyera ciertos elementos que no son ecorresponsables, hay un riesgo mucho mayor de que el producto termine perjudicando el medioambiente al final del ciclo de su vida útil. Tomemos a los plásticos/PVC como ejemplo; en cierto punto del ciclo de vida útil del producto, los elementos del medio ya no pueden reciclarse para la producción de nuevos materiales y tiene que eliminarse en un vertedero. Cuando esto sucede, muchos de los elementos en estos materiales compuestos requieren de más tiempo para descomponerse o no pueden descomponerse en absoluto, en este caso, deben eliminarse con un proceso que emite toxinas dañinas directamente hacia la atmósfera inmediata”.
Además del PVC, otros componentes también demuestran sus características perjudiciales. Según Stan Holt, gerente de desarrollo para Norteamérica de Continental Grafix USA, Inc., los poliuretanos, duroplastos y poliamidas no pueden ser reciclados. Los plastificantes como benzoatos y ftalatos pueden ser tóxicos y peligrosos para la salud y el medioambiente.
“Los contaminantes de metales pesados como el plomo y el bario representan un riesgo para la salud si se ingieren, convirtiéndolos en una preocupación cuando se trata de imprimir imanes que pueden ser tocados o manipulados por niños”, explica Jim Cirigliano, gerente de marketing de Magnum Magnetics Corporation.
Los halógenos (el flúor, cloro, bromo y yodo) son peligrosos, especialmente a la hora de deshacerse de ellos. “Si un plástico halogenado se incinera, el halógeno se libera de la estructura plástica. Durante el proceso de incineración, los halógenos, los cuales son altamente reactivos, reaccionan con cualquier agua existente para formar ácidos muy fuertes como HCI y HF. Para prevenir que estos derivados alcancen la atmósfera, la pila que será incinerada debe contener depuradores especiales que limiten la emisión del halógeno y también requieren ciertos químicos para neutralizar el material. Estos químicos pueden convertirse en residuos peligrosos”, declara Mandy Hulke, ingeniera de desarrollo de producto para 3M Commercial Solutions.
Remplazo
En la ausencia de componentes no ecorresponsables, algo generalmente debe sustituirse. Estas alternativas son más verdes de muchas formas. Desafortunadamente, muchas de ellas se esconden, como en una receta secreta. La mayor parte de los distribuidores no hacen alusiones a la pregunta de si algo está libre de ftalatos, ¿cuál elemento ha sido empleado en su lugar? o si no hay PVC, ¿qué componentes crean un medio estable y duradero?
“Al ser la sustentabilidad un aspecto tan importante en este sector, los fabricantes son recelosos y tienden a no revelar qué hacen para ser ecorresponsables. La sustentabilidad no es fácil y a veces puede ser cara, por tanto, si tienes una fórmula que te permite ser verde de manera eficaz, es realmente una ventaja competitiva”, explica Jason Yard, gerente de marketing de Mactac Distributor Products.
“Ahora mismo no hay un sustituto común para estos químicos en la industria (de la imprenta). Están en todas partes, dentro del sector, porque tienen un gran rendimiento, disponibilidad y son económicos”, dice Hulke.
Algunas soluciones conocidas incluyen el poliéster reciclado. “El polipropileno o poliéster son sustitutos comunes para el PVC, porque tienen las mismas o mejores características de desempeño. En la mayor parte de los casos, también son reciclables”, comparte Clay Reierson, gerente de proyecto de Xcel Products, Inc.
Las telas EverGreen de Dickson Coatings consisten de hilos de poliéster y capas a base de agua, por tanto carecen de PVC, ftalatos, formaldehídos, fosfatos y éteres de glicol. Según Gautier Peers, gerente de ventas de territorio para Dickson Coatings USA, esto los convierte en no tóxicos y ecorresponsables, pues nunca contienen sustancias que son dañinas para la salud por contacto o por inhalación.
El tejido Deko-Green (FR) de Pacific Coast Fabrics está elaborado con filamento de poliéster 100 por ciento reciclado, el cual consiste de botellas de refrescos.
En lugar de PVC, también existe una película de uretano. “Los filmes de uretano no contienen halógenos ftalatos, PVC o VOC. Ya que el uretano es inherentemente maleable, no requiere plastificantes para mantener su flexibilidad. Además, los filmes de uretano pueden ser reciclados empleando métodos químicos y mecánicos”, explica Chris Hagen, especialista de aplicaciones/filmes para gráficos de Argotec LLC.
Natural AdCampaign promueve sus productos 100 por ciento naturales, lo cual significa que nada ha sido sustituido porque no hay necesidad de hacerlo: no hay aceites u otros sintéticos que se emplean en la manufactura. El producto es 100 por ciento natural, elaborado de algodón y yute, materia prima sustentable.
Los sustratos a base de papel que se emplean en lugar de láminas plásticas son otra opción. “Los sustratos hechos de materiales naturales, como pulpa de madera y papel pueden reciclarse más fácilmente que los compuestos, a la vez que son naturalmente biodegradables al final de la vida útil del producto”, explica Nole.
Tony Lampariello, gerente nacional de medios rígidos de Agfa Graphics, está de acuerdo: explica que además de láminas a base de papel, los materiales con un núcleo de cartón tipo nido de abejas o el papel acanalado son otras posibles sustituciones.
“Muchas alternativas de fibra son reciclables. Aquellas que no lo son pueden ser incineradas de forma inocua y se descomponen en un vertedero sin dejar rastros de sustancias perjudiciales”, señala Paul Ciccone, vicepresidente de investigación y desarrollo de Monadnock Paper Mills, Inc.
Otra alternativa al MDF, tableros de partículas y láminas de plástico de espuma o rígidas no renovables son tablas o láminas a base de fibras naturales con un núcleo “kraft”. Xanita Print consiste de un núcleo de kraft reciclado prensado entre forros de papel kraft blanco imprimible. El potente centro de alta compresión está fabricado de deshechos posconsumo de kraft y bagazo de caña de azúcar.
Guardar las apariencias
Aunque las sustituciones puedan hacer los medios más sustentables, deben tenerse en cuenta otras características. El sustrato tiene que rendir en el nivel de su contraparte menos ecológica. Esto significa la calidad de impresión que se pretende alcanzar, compatibilidad de tintas y fiabilidad. El objetivo es que un producto ecorresponsable aún tenga la misma capacidad de impresión, según Matt Meyer, coordinador de marketing de Plastiprint Sales Company.
“Los equipos de investigación y desarrollo (R&D, por sus siglas en inglés) están constantemente analizando fórmulas químicas y buscando utilizar sustancias químicas no dañinas en sus productos. Esto puede ser una tarea intimidante, ya que muchas sustancias y elementos químicos son necesarias para componer tratamientos, revestimientos receptivos a tintas y/o fórmulas resistentes al fuego”, admite Eric Tischer, presidente de Verseidag US.
Lily Hunter, gerente de producto de textiles y consumibles de Roland DGA Corporation, dice que la efectividad del remplazo de componentes más ecológicos se evalúa durante la fase R&D del producto. “Es una cuestión de calificar la materia prima y encontrar la combinación adecuada, asegurándonos de que el producto presenta las cualidades deseadas y comprobar su capacidad de impresión y durabilidad. Básicamente se trata de prueba y error. Puede tomar años para que un fabricante de medios encuentre todos los materiales y componentes adecuados, al mismo tiempo que mantiene un producto asequible”, prosigue.
Hagen señala que el filme de uretano es muy maleable y extremadamente resistente a las inclemencias del tiempo, soportando la radiación UV, abrasión y sustancias químicas, convirtiéndolo en un medio ideal para la rotulación de vehículos y aplicaciones en exteriores.
Los sustratos a base de papel vienen con sus ventajas. “Ha habido grandes mejoras en la durabilidad de sustratos a base de fibras que satisfacen los requerimientos de desempeño de muchas aplicaciones comerciales”, indica Ciccone.
Respecto a los acabados, “muchos de los productos a base de fibras también pueden conformarse o cortarse fácilmente y pueden ser empleados para exposiciones de corto plazo en puntos de venta”, coincide Marty Davis, director de formato ancho y gráficos de Mac Papers.
A pesar de que existen muchos de estos elementos de remplazo y/o sustancias químicas que cumplen con la demanda, también hay desventajas.
“La aplicación es el tema más importante. Naturalmente, una malla libre de PVC, aunque sea apta para el uso en exteriores para corto plazo, no resistirá las condiciones del tiempo tan hábilmente como una versión con capa de PVC, cuando se requiere una instalación a largo plazo”, admite Joseph M. Rooney, gerente de ventas para Norteamérica de Heytex.
“Hemos determinado que algunas de las opciones ecológicas no rinden óptimamente en aplicaciones exteriores, debido a sus propiedades naturales y biodegradables”, explica Nole.
Según Yard, “a veces estos materiales no son tan duraderos a la intemperie porque los químicos empleados en ellos se descomponen, tornan amarillos o desgastan con mayor rapidez que en un PVC tradicional”.
La compatibilidad de tintas es también una cuestión importante. “No todas las tintas se adhieren al polipropileno o al poliéster, salvo cuando la superficie ha sido tratada con un revestimiento (lo cual añade un costo adicional además del costo ya superior de las resinas de polipropileno y poliéster”, comparte Reierson.
Sustituyendo
Cada producto ecorresponsables difiere en su composición. Aunque la mayoría puede carecer de PVC, aceites, petróleo, halógenos, ftalatos o VOC, los componentes que los remplazan varían según el fabricante. En definitiva, es la tarea del proveedor de servicios de impresión confirmar si en efecto, los medios son realmente ecológicos y pueden rendir de forma adecuada.
Mayo/May 2016, Digital Output Español